Con un transmisor de 5 Watt, con un micrófono para sordos ubicado en el Teatro Coliseo y con una antena en la cúpula de la casa de remates ubicada en Cerrito y Charcas, el médico Enrique Telémaco Susini, junto a otros tres estudiantes: Miguel Mujica, César Guerrico y Luis Romero Carranza, el 27 de Agosto de 1920 transmitieron la ópera Parsifal de Richard Wagner en vivo, Con esto se ganaron el histórico apodo de “Los Locos de la Azotea”.
Enrique Telémaco Susini, radioaficionado al igual que sus amigos de Barrio Norte, ya era médico especializado en otorrinolaringología, vinculado con la Armada y en tal condición, que al fin de la Primera Guerra Mundial, viajó a Francia enviado a estudiar los efectos sobre las vías respiratorias de los gases asfixiantes y paralizantes utilizados. Desde Europa regresó con equipos de radiocomunicaciones de rezago, que resultaron la base de los equipos.
Se calcula que la irradiación de la ópera desde el Coliseo llegó a unas apenenas 50 radios galenas, existentes en Buenos Aires y ubicadas a no más de 10 kilómetros del lugar. Aunque no fue la primera transmisión de radio en el mundo (el norteamericano David Sarnoff y el italiano Guillermo Marconi ya lo habían experimentado 71 días antes), se considera que la de Los Locos de la Azotea, llamada LOR Radio Argentina, fue la primera emisora pensada en términos de difusión permanente y con intenciones de continuidad artística. Porque volvió a salir el 28 de Agosto y así sucesivamente, conformando algo parecido a una programación.
Cada uno de estos Locos se destacó en lo suyo… Romero Carranza, fundó en los años ’30 la primera fábrica de celuloide virgen para cine y patentó antes que la RCA Víctor de los Estados Unidos un sistema de grabación de sonido para películas.
Sobre la casa de remates del padre de César Guerrico, se sostuvo, a partir de 1922, la primera antena de madera de Radio Argentina.
Miguel Mujica fue Ministro de Comunicaciones del Presidente Frondizi y a él se debe en 1961 la instalación del primer sistema de coaxiles.
Si bien todos eran muy cultos, Susini fue, por sus amplios conocimientos y variados intereses, un renacentista en su tiempo. Conocedor de profundo de la música clásica y la ópera, compartió el ejercicio de la medicina con la dirección de teatro, ópera y zarzuela, fundó también la primera empresa de telefonía de larga distancia que luego vendió a la transnacional ITT. En 1930 impulsó la creación de Lumiton, uno de los primeros estudios de cine argentino, del que en 1933 salieron algunas de las primeras películas sonoras del cine nacional como “los tres berretines (tango, futbol. Radio)”.Y en 1951, aparece manejando cámaras en Plaza de Mayo en lo que fue la transmisión inaugural de la televisión argentina.